jueves, 7 de agosto de 2008

Visita a Granada y La Alhambra Parte I


Uno de mis principales objetivos para estas vacaciones andaluzas era visitar La Alhambra, esa que me había embrujado desde que con 9 o 10 años leí los "Cuentos" en los que Washington Irving nos cuenta las leyendas inspiradas en las vidas que se desarrollaron dentro de esos muros de ensueño y esos jardines paradisiacos. Dice un dicho popular andaluz: "Quien no ha visto Granada no ha visto nada". Y es que independientemente de su belleza, en Granada y La Alhambra culminó una etapa de la historia de la humanidad y empezó otra. Puede decirse que la historia de España como nación comenzó justamente con la derrota del infeliz Boadbil en 1492, año que como sabemos marcó también el inicio de la historia de la América Hispana, y fue precisamente en La Alhambra recién conquistada donde Isabel la Católica dio a Colón el visto bueno - y el dinero - para su tremenda empresa.

No soy una fotógrafa experta, pero intentaré reproducir el recorrido turístico que hicimos enseñandoles solo una quinta parte de las innumerables fotos que tomé (parecía una turista japonesa).

En una de las calles más centricas de Granada capital está la estatua de la Reina Isabel la Católica con el Almirante.




Teníamos solo una hora libre para recorrer a pie el centro histórico. Lo primero que vimos fue el Corral el Carbón, que data de principios del siglo XIV. Originalmente era un albergue de mercaderes y luego se utilizó para almacenar carbón, de ahí su nombre. Y esta es su fachada.


De ahí pasamos por unas calles muy estrechas llenas de mercadillos en la parte más antigua de la ciudad, algunas de cuyas partes se dice que datan de los tiempos del dominio moro.


Por una de esas callejuelas salimos a la Capilla Real, donde están enterrados los Reyes Católicos.



Entre la Capilla Real y la Catedral se encuentra la Iglesia del Sagrario


Por más que di vueltas, no encontré nada parecido a una plaza de la Catedral, así que tomé esta vista desde una calle lateral.



Del otro lado encontré la Puerta del Perdón, por la que según la tradición entró a la Catedral un ladrón que se refugió allí para pedir clemencia y le fue concedida por los Reyes Católicos. Encima aparecen dos figuras alegóricas a la Fe y la Justicia, que según la inscripción caracterizaban a los monarcas, lo cual les permitió ganar a los "infieles".

Luego intenté tomar lo mejor que pude una de las torres de la catedral.


También me llamó la atención este parque en el que se han instalado las "terrazas" de un restaurante.


Ya de regreso vimos el edificio del Ayuntamiento.


Muy cerca del hotel donde almorzamos - un buffet tipo mesa sueca que estuvo muy bien - está el Teatro Isabel la Católica con una gran estatua de la Reina sobre su torre.




Por último, en una puerta, esta aldaba que me parece haber visto antes en alguno de los portones soberbios de la ciudad de Camaguey.





Hasta aquí por hoy, amigos míos. Mañana entraremos en la anunciada Alhambra, a la que llegamos a las dos y media de la tarde con 40 grados a la sombra.

2 comentarios:

Aguaya dijo...

Me gustan esos paseos documentados digitalmente!!

Cuando yo fui a Granada pude solo ver La Alhambra. La ciudad se nos quedó pendiente......

Rosa dijo...

Agu, la verdad es que no vi todo lo que quería, porque en una excursión de un día no se puede. Por ejemplo, me quedé con las ganas de hacer lo que llaman la "ruta lorquiana", y no vi todo lo que se puede ver en La Alhambra, pero al menos ya puse mis pies en ese lugar mágico. Hoy va ese post sin falta.

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